lunes, agosto 18, 2008

Casida de las palomas oscuras


Por las ramas del laurel
vi dos palomas oscuras.
La una era el sol,
la otra la luna.
«Vecinita», les dije,
«¿dónde está mi sepultura?»
«En mi cola», dijo el sol.
«En mi garganta», dijo la luna.
Y yo que estaba caminando
con la tierra por la cintura
vi dos águilas de nieve
y una muchacha desnuda.
La una era la otra
y la muchacha era ninguna.
«Aguilitas», les dije,
«¿dónde está mi sepultura?»
«En mi cola», dijo el sol.
«En mi garganta», dijo la luna.
Por las ramas del laurel
vi dos palomas desnudas.
La una era la otra
y las dos eran ninguna.

Federico García Lorca

Camarón de la Isla

Paco Ibáñez

Carlos Cano

Atilio y los Alimonados

1 comentario:

Anónimo dijo...

Gracias por seguir alimentando esta maravillosa página.

Me emociona tanta generosidad.