Envuelta por el aire
de la mañana en fiesta
entre risas y músicas,
campanas y alegría,
olvídate del hombre
que hasta ayer te dolía
como una desventura:
canta, ríe, juega,
apuesta a no acertar,
para así acostumbrarte
a ese sabor amargo
que se llama tristeza,
y que aparece siempre
cuando el amor se va.
José Agustín Goytisolo
Paco Ibáñez
Ha sido un placer visitarte.Volvere seguro.Con infinito respeto.
ResponderEliminarGran poema me trae muchos recuerdos eso es lo que hacen los poemas, son como pequeñas bolas llenas de momentos y sentimientos que explotan cuando llegan al corazón adecuado, me encantan los poemas de amor, que la poesia nunca muera, gracias a los grandes poetas como usted.
ResponderEliminar