A Pepín Bello
Eras rosa.
Te pusiste alimonada.
¿Qué intención viste en mi mano
que casi te amenazaba?
Quise las manzanas verdes.
No las manzanas rosadas...
alimonada...
(Grulla dormida la tarde,
puso en tierra la otra pata.)
Federico García Lorca
Atilio y los Alimonados
Rafael Alberti
Comentario sobre el poema de Rafael Martínez Nadal en su obra "Cuatro lecciones sobre Federico García Lorca" (Fundación Juan March 1980). Páginas 93 y 94.
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